Nuevo documento de Estudios de Progreso 71/2012: El re?gimen de garanti?a de ingresos mi?nimos en Espan?a: una propuesta de revision
Por Borja Barrabé y César Martínez, profesores de la Universidad Autónoma de Madrid.
La mayor medida contra la pobreza es el empleo En noviembre se ha registrado una subida del paro de 74.296 personas, siendo éste el peor otoño para el empleo. Con esta subida, el número de desempleados asciende ya a los 4,9 millones, una cifra que hay que tener muy en cuenta si consideramos que en España la red de protección social es insuficiente y está pensada para crisis de poca duración.La Fundación Alternativas ha presentado hoy un documento de Borja Barrabe? y Ce?sar Marti?nez, profesores de la Universidad Autónoma de Madrid: “El re?gimen de garanti?a de ingresos mi?nimos en Espan?a: una propuesta de revision”.En este documento, los autores señalan cómo ha ido aumentando el número de desempleados que no reciben ninguna prestación social, siendo ésta, además, de una duración máxima de 24 meses. Pero ¿qué pasa después de esos 24 meses?La propuesta central de este documento es la de conseguir extender el derecho a una renta minima, es decir, que no haya nadie en España sin ningún tipo de ingreso. Esto que a priori puede suponer un coste elevado, supondría en realidad la mitad de lo que va a costar recapitalizar Bankia –que por otra parte, era una de las cajas que se podia liquidar y no se ha hecho-. En otras palabras, el coste neto de ampliar el derecho a la protección social para la Administración sería inferior al calculado, dado que estaría destinado a una población que consume y estabiliza la balanza. Pero ¿de dónde sacar los recursos siguiendo políticas de recortes y austeridad?Los autores señalan que en España se ha extendido la creencia de que el gasto público es muy elevado, pero en realidad es menor que la media de la UE –la diferencia con Reino Unido es de casi 6 puntos con respecto al PIB, mientras que con Francia la diferencia llega hasta los 12 puntos-.Si bien, el déficit público sí que es de los más elevados de la Unión.La explicación de porqué, destacan los autores, reside en la escasa presión fiscal que sorpotamos en España sumado a un elevado fraude al fisco. Es decir, en España el problema no es de gasto sino de falta de ingresos tributarios.Un ejemplo que resalta el documento es el de los impuestos sobre sociedades. En 2007 se recaudó algo más de 44.000 millones de Euros, mientras que en 2011 el total recaudado a través del impuesto de sociedades ha sido de 16.611 millones, es decir, más de 20.000 millones de euros anuales menos. Esta bajada tan amplia no se explica solo por la disminución del beneficio de las empresas, sino por el indicador del tipo efectivo y las operaciones intergrupos que son la causa de toda esta pérdida de ganancia por parte del Estado –de cada 100 euros de beneficio una sociedad pagaba en 2004 el 24%, mientras que en 2009 bajó hasta el 16%-.El documento apuesta por el modelo europeo, por igualarnos a la media de la Unión Europea y por simplificar el impuesto de sociedades.Este documento se puede descargar: