Novedades
La cultura española recibe un aprobado raspado (5.02)
La cultura española recibe un aprobado raspado (5.02)
La Fundación Alternativas organizó este martes la presentación de su ‘Informe sobre el estado de la cultura 2022. El sector audiovisual’, en un evento celebrado en la Academia de Cine. Como viene siendo habitual en este documento, Alternativas lleva a cabo una encuesta entre profesionales del sector, de cara a tomar la temperatura sobre el estado de la cultura. En esta edición, la cultura española obtiene un aprobado muy raspado, ya que asciende a 5.02, lo que supone un 3.4 de decrecimiento porcentual si se contrasta con la nota del pasado año.
Cabe destacar ciertos aspectos que el estudio ha llevado a cabo en un año condicionado por la esperanza en la recuperación post pandemia, influenciada por la alta vacunación y los estímulos económicos de los fondos ‘Next Generation’ de la Unión Europea. Estos, a diferencia de la crisis de 2008, caracterizada por recortes brutales, han insuflado al sector cultural de un montante económico inédito y clave para la estimulación del sector, que en esta edición del informe se centra, de manera somera, en la Ley General de Comunicación Audiovisual, aprobada el 26 de mayo. Por otra parte, una vez superada las continuas incertidumbres de las sucesivas olas pandémicas, pero inmersos en un contexto de guerra en Europa, con una inflación desajustada que merma el poder adquisitivo de los españoles, las expectativas sobre la cultura en España aletean entre el pesimismo y el optimismo, o incluso el desánimo por un futuro incierto. Todo ello incide, aún más en un ámbito, la cultura, que está en crisis permanente.
La pregunta que tiene, al igual que el pasado año, una mayor puntuación de media respecto al resto, en concreto un 7.58, es la siguiente: ¿Los creadores se están aprovechando de las nuevas redes para conectar con sus públicos? Esto se puede interpretar en relación con el uso de la digitalización por parte de los artistas, lo cual se puede corroborar con la inercia pandémica de uso de las plataformas de reproducción y streaming, sobre todo en el sector musical y audiovisual y una optimización de la difusión. Por otro lado, la cuestión que menos puntuación media se lleva es la siguiente: Los creadores consiguen una remuneración justa para mantener su trabajo. En concreto, alcanza un 3.18, lo que indica y reitera la eterna visión precarizada en el sector cultural y creativo español.
Tomando de referencia los resultados de la pasada edición relativos a las principales fortalezas de la cultura en España, en esta ocasión se invierten los dos puntos más valorados de 2021; a saber, el potencial de la colaboración en red de los creadores es el elemento más valorado; en detalle, el ítem Los creadores se están aprovechando de las nuevas redes para conectar con sus públicos (7.58), seguido del papel de la tecnología en beneficio de los autores, materializado en Los creadores se están aprovechando de las nuevas tecnologías para aumentar su creatividad (6.94). Asimismo, y en relación con lo anterior, la innovación, tanto en la búsqueda de públicos como en el rol de las pequeñas y medianas empresas en la innovación, siguen siendo los hitos mejor valorados. En concreto, Las PYMES juegan un papel esencial como canteras de innovación (6.98) y Las corrientes y estilos innovadores pueden expresarse y buscar su público (6.71). Por debajo de los anteriores, ligeramente, se sitúa otro hito ligado a la tecnología y la búsqueda de los públicos: La creación cultural expresa el abanico de valores ideológicos presente en la sociedad española (6.60).
El siguiente punto mejor valorado tiene que ver con la diversidad cultural de España y su poso político, entendiéndose esto como riqueza creativa: Los productores-editores componen un abanico plural de voces e intereses (5.96) y La oferta cultural refleja la diversidad de nuestra identidad cultural (5.80). A continuación, se recalca el plano digital y de libre elección del usuario de cultura, que descansa sobre tres puntos: Los usuarios disponen en Internet de una gran libertad de elección (5.69); Los usuarios tienen una gran diversidad de oferta disponible (5.64), y Los usuarios tienen una gran libertad de elección cultural (5.59).
Precariedad del sector
Respecto a los ítems menos valorados destacan, en primer lugar, la precariedad del sector y, en segundo, dos bloques que tienen en común la proyección exterior y las políticas públicas. Así pues, la visión más pobre en el marco del estado de la cultura en España 2022 se fragua en la siguiente afirmación: Los creadores consiguen una remuneración justa para mantener su trabajo (3.18). Los posteriores ítems, como se ha reseñado, corresponden a otras familias, a saber: Las políticas públicas de cooperación exterior son suficientes y efectivas (3.69). Le sigue, en esta línea, Las políticas públicas de cooperación exterior son suficientes y efectivas (3.74); y se regresa al plano remunerativo, empatando con una cuestión relativa a la disciplina creativa de esta edición: Las políticas públicas para la industria audiovisual tienen una estrategia clara y coherente y Las PYMES de la edición/producción consiguen una remuneración suficiente para su sostenibilidad (4.01).
Tras esto, el informe incide en el impacto en el exterior con una crítica a los medios: Los medios de comunicación tradicionales promocionan la diversidad cultural (4.04); Los intercambios culturales con la UE son suficientes y equilibrados (4.18); y, por último, las siguientes tres cuestiones: Las políticas públicas de cooperación incentivan el intercambio y la diversidad intercultural (4.26). Este punto se hila a la interinidad y la cosa pública: Las políticas públicas defienden la remuneración justa del autor (4.28), y, por fin, y con la misma nota, Las políticas públicas de cooperación crean nuevos públicos para la cultura española.
En el evento participaron Fernando Méndez-Leite, director de la Academia de Cine; Diego López Garrido, vicepresidente ejecutivo de la Fundación Alternativas; Inmaculada Ballesteros, directora del Observatorio de Cultura y Comunicación de la Fundación Alternativas y coordinadora del ICE22; Cristina Andreu, presidenta de CIMA y autora del ICE22; Fernando Victoria de Lecea, presidente de Profilm; y Rosa Franquet, catedrática de Comunicación Audiovisual y Publicidad en la UAB y autora del ICE22.